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1.9.10

"Piensa en grande"

Comienza septiembre y con ello el nuevo curso escolar. Este curso tenemos un acontecimiento importante a nivel político: elecciones municipales/autonómicas. Con ilusión y esperanza deseamos que la conciencia verde se incremente en la sociedad y se refleje electoralmente. La cuenta atrás comienza ¡ya!.

Recordando el vídeo electoral a las pasadas elecciones parlamentarias (2009), que recoge lo que nos une al espacio verde europeo:



7.8.10

CARTA POR LA UNIDAD DE ACCIÓN

La Coordinadora Verde del proceso de Hondarribia es un espacio de confluencia abierto a todos los partidos u organizaciones verdes —locales, autonómicos o estatales— así como a colectivos y personas de la sociedad civil que quieran participar en la reconstrucción de un espacio verde autónomo con peso propio en España. Busca caminar hacia la unidad de acción de quienes se mueven en el eje de la ecología política y quieren refundar el proyecto político verde en base al trabajo en red de las bases del movimiento ecologista.

En esta senda, se dota de la siguiente Carta por la Unidad de Acción donde se recogen los principios que le sirven de referencia y marco común.


Respeto a las Declaraciones de Hondarribia. Las llamadas Declaraciones de Hondarribia, que han surgido de los sucesivos encuentros mantenidos para ir avanzando hacia la unidad del movimiento verde en España, son el reflejo de la voluntad de las bases verdes, que han plasmado en ellas sus reflexiones y decisiones adoptadas por consenso. Esa legitimidad reclama que sean aceptadas y respetadas por cuantas personas pertenecen o se adhieran al proceso de Hondarribia, como una inmersión voluntaria en las decisiones colectivas ya adoptadas. Las Declaraciones de Hondarribia no son inamovibles. Los acuerdos reflejados en una determinada declaración pueden ser modificados por otra por acuerdo asambleario en un nuevo encuentro posterior, pero siempre se exigirá el respeto de cuantas estén vigentes, como un ejercicio de aceptación de la más genuina democracia.

Integración de las bases en los grupos de trabajo en red y trabajo en común. La Coordinadora Verde se estructura sobre grupos de trabajo temáticos que trabajan en red y que constituyen su columna vertebral. Es en ellos donde las bases tienen el derecho y la oportunidad de participar activa y directamente en la elaboración de los posicionamientos políticos y sociales tanto para uso interno como para difusión a nivel público. Mediante dichos grupos, la Coordinadora Verde garantiza la autonomía e independencia de la política verde que defiende y el ejercicio en su seno de una democracia participativa real. Los colectivos que se adhieran a la Coordinadora Verde promoverán la integración de, al menos parte de sus bases, en los grupos de trabajo de su elección. Las personas que se adhieran a título individual procurarán, en la medida de sus posibilidades, su inclusión en algún grupo. De la misma manera, los diferentes componentes de la Coordinadora Verde, con un enfoque particular en los territorios donde existen varios partidos verdes, se esforzarán siempre cuando sea posible para trabajar de forma conjunta.

Independencia del proyecto político verde a nivel estatal. Al igual que en la gran mayoría de Europa, afirmamos de nuevo la total independencia del proyecto verde de cualquier otra ideología política así como la existencia de un espacio propio para la Ecología política en España capaz de integrar todas las corrientes del ecologismo político (medioambientalistas, ecosocialistas, ecofeministas, animalistas, etc.) y conseguir representación política en todas las esferas. Sin rechazar la posibilidad de alianzas puntuales principalmente a nivel local y autonómico, nos comprometemos a sumar energías para (re)construir una fuerza verde estatal de referencia a la vez garante de la autonomía de las asambleas locales y válida por si sola por lo menos en los comicios generales y europeos.

Renovación y relevo generacional. Reconocemos los esfuerzos que hicieron hombres y mujeres ecologistas que han liderado y/o siguen liderando el movimiento político verde por un mundo más justo y un planeta sostenible. Al mismo tiempo, constatamos que los marcados conflictos y protagonismos personales han contribuido fuertemente a la división y fragmentación del espacio verde. Por tanto, nos comprometemos a impulsar una necesaria renovación y relevo generacional dentro del movimiento verde y llamamos a las personas que han tenido un protagonismo histórico en el movimiento verde a sumarse al proceso, estén hoy en el espacio que estén, para que aporten como miembros individuales sus conocimientos y sus experiencias al servicio del surgimiento de nuevos liderazgos y un nuevo ciclo verde en España.

Convivencia, respeto y no agresión. Constatamos que históricamente el movimiento verde en España ha sufrido de dinámicas de fragmentación y autodestrucción que conducen al desaliento, que le impiden crecer y dedicarse a un trabajo político eficaz, por lo que es necesario superar esa situación con decisión y energía. Desde el respeto a la diversidad verde existente, entendemos que los diferentes posicionamientos estratégicos o políticos que puedan existir, siendo legítimos, no pueden servir de excusa ni autorizan a la agresión, sea verbal o de otro tipo, sea individual o colectiva, sea pública o privada entre diferentes colectivos verdes. Por tanto exigimos en nuestra práctica diaria el destierro de la descalificación y/o del insulto y este compromiso se exige a todas las personas individualmente, así como, subsidiariamente, a los responsables de los colectivos en que se integren. Asimismo llamamos explícitamente a no arreglar los posibles conflictos políticos que surjan entre colectivos verdes en público sino más bien a nivel interno y/o por canales que no perjudiquen al conjunto del espacio verde. Por otro lado, entendemos que, hasta una mayor confluencia de la galaxia verde, los posicionamientos públicos de los diferentes colectivos verdes, integrados o no en la Coordinadora Verde del proceso de Hondarribia, son complementarios a los de los demás colectivos verdes.

Principio de autoexclusión. Este proceso está abierto a todas las personas y colectivos que se consideren verdes, sin distinción de partido, familia política, territorio u organización, desde la afiliación, la simpatía o la amistad por el movimiento verde. La única forma de apartarse del proceso es no respetando los acuerdos colectivos que voluntariamente se adquieren al unirse a Hondarribia. Asimismo se entenderá que se autoexcluye de la Coordinadora Verde y del proceso de Hondarribia la persona o colectivo que no respete los principios recogidos en esta Carta, que buscan posibilitar el resurgimiento en España de una fuerza verde que lleve a la práctica las propuestas que defiende la Ecología política.

4.8.10

PANORÁMICA VERDE ESPAÑOLA

El panorama español nos muestra una gran variedad de partidos verdes, en ocasiones aliados con la izquierda y el nacionalismo, con un coste político y social importante de pérdida de identidad propia e incluso invisibilidad. En la actualidad esta diversidad de partidos verdes tienden a unirse apostando por su origen singular, que marque una fuerte identidad distintiva que le diferencie del resto de partidos.

A esta diversidad de partidos unidos por una ideología verde, hay que sumar en el escaparate electoral la presencia de partidos de izquierda, que desde unos años atrás han añadido la palabra "verde" (incluso el logotipo) a su nombre y siglas de partido, contribuyendo a la confusión social de la identidad verde a consta de un posible incremento de votos por parte de la izquierda.


La relevancia política verde en España es débil, no ocurriendo así en otros países de Europa. Las coaliciones hasta ahora propuestas han fracasado. El éxito del modelo político francés por el que se obtuvo más del 16 % de votantes en el 2009 (igualando a los socialistas) marca un antes y un después en la política y la implicación social.

La cada vez más cercana "unión verde" en España, y su cercanía a la defensa de los derechos humanos, justicia distributiva y justicia cultural, junto con el ya iniciado trabajo de base social que recoge iniciativas e inquietudes sociales, lleva al espacio verde español a ser un importante movimiento en potencia que puede tener un mayor éxito político en las próximas legislaturas.

15.7.10

IDENTIDAD: CARÁCTER PROPIO Y SINGULAR

La identidad verde desde su origen es singular, claramente diferenciada de la identidad de izquierda, en contra de la confusa opinión social que clasifica el espacio verde como un subgrupo de la izquierda.


La política de izquierdas y derechas tienen en común la consideración del dominio humano sobre los ecosistemas y la biosfera, la negación del valor central de los sistemas vivos para toda acción e institución humana. Esto les posiciona en un modelo productivista a favor del crecimiento ilimitado de la producción, el consumo y la economía, con una creciente extracción de los recursos ilimitados del planeta. Este modelo trata de sostener un sistema de creencia fuertemente arraigado en la sociedad occidental de bienestar, salud y mejora humana.


La política verde no es exclusivamente medioambiental, entendiendo ésta como protección de la naturaleza. Está unida a la equidad y la justicia, a los derechos humanos y sociales. Por tanto es una identidad socioambiental, más conocida en la actualidad como "ecosocialismo". Por ello puede compartir algunos de los valores tradicionales de la izquierda, teniendo la política verde una diferenciada identidad propia.


Algunas figuras de la política verde, como Daniel Cohn-Bendit (eurodiputado, encabezando las listas francesas de Europa Écologie), proponen crear una "tercera izquierda" distinta de la izquierda tradicional comunista y de la izquierda socialdemocrática. Pero hoy por hoy el espacio verde no es un identificador de la izquierda, por lo que electoralmente puede atraer a votantes muy variados, con posiciones sociales e ideológicas distintas.